Entramos en una de las épocas del año en los que los negocios disponen de mayores beneficios, de ahí la necesidad de atraer y mantener a los clientes contentos, por eso la decoración es uno de los puntos fuertes para ello.
Atraer la mirada de la gente que pasa por delante de nuestro negocio es clave, eso sí, siempre regulando la carga sin que se convierta en una feria, pero sirviendo de llamada para el público. Una idea es, por ejemplo, colocar las luces en la entrada para que una vez dentro no se distraiga a los clientes y si lo hagan los productos que vendemos.
Esta comprobado en estudios que una vez la gente se sumerge en el espíritu navideño aumenta la cantidad de dinero que se gasta: la parte emocional se superpone a la racional y nos lleva a comprar mas cosas de las que teníamos pensadas.
Es importante, en el interior, colocar adornos nuevos que den sensación de cuidado ya que nadie quiere comprar en un sitio decadente.
Debemos recordar que cada año las tendencias cambian, pero cada negocio es diferente, así como cada zona geográfica tiene unas costumbres, por eso también es importante tomar nota de la tendencia de otros negocios.