A pesar de que lo digital tiene cada vez más repercusión, el papel sigue siendo protagonista especialmente en lo que a publicidad se refiere.
El folleto se trata de un texto impreso en pequeñas hojas de distintas medidas que sirve como herramienta publicitaria dando a conocer nuevos productos, servicio u ofertas y que generalmente es entregado en mano en la vía publica en un mostrador, buzón, etc.
Si tenemos en mente realizar un folleto, debemos recordar la importancia del gramaje, el cual consiste en la medición de los gramos de peso de un determinado papel por cada metro cuadrado.
A la hora de medir este gramaje, se debe disponer de una muestra cuadrada o rectangular de este para, posteriormente, medir la superficie de la muestra multiplicando los centímetros de cada uno de los lados.
El siguiente paso será pesar la superficie de la muestra de papel calculando a través de una regla de tres el peso que equivaldría un metro cuadrado de papel.
Finalmente se debe escoger el gramaje más adecuado para nuestros folletos teniendo en cuenta la regla simple de considerar un estándar entre 170 y 200 gramos para los de media carta y 200 y 250 gramos para tamaños de carta y superiores.