La publicidad ha dejado de ser una herramienta más del marketing para integrarse en un complejo plan de acciones de comunicación comercial, a los medios tradicionales, televisión, radio, prensa, exterior y RR.PP. ahora hay que añadir todas las posibilidades que ofrece el medio online.
El código de autorregulación tiene como objetivo establecer las normas que deberán cumplir los anunciantes, las agencias de publicidad y los medios de comunicación.
Habitualmente nos comunicamos porque confiamos en que nuestros interlocutores van a transmitirnos información veraz o verdadera; suponemos en la mayoría de los casos que no van a tratar de engañar ofendernos o causarnos algún perjuicio. Aunque es menos probable, deseamos también que la información nos resulte útil y que se nos dé de forma breve, agradable y divertida.
La exigencia de veracidad propia de la comunicación no significa que la información facilitada tenga que ser siempre absolutamente exacta.